Fisioterapeuta logra seguir su profesión luego de emigrar y se convierte en la más solicitada

La protagonista de esta historia pudo viajar y ver que oportunidades se les presentarían para tomar firmemente una decisión, empezaba Venezuela a sufrir la escasez de productos de primera necesidad y con una niña pequeña se hacía más difícil de sobrellevar la situación. Ejercía su profesión como Fisioterapeuta y hoy orgullosa de lo que hace nos cuenta como retomó sus actividades para ofrecer un buen servicio. #MiVuelo presenta a Rosenyl García Daal.

Fue el 26 de enero de 2016 cuando esta venezolana sale de su país junto a su esposo e hija, una vez más la situación país fue el punto que tomó fuerza para emprender vuelo rumbo a los Estados Unidos, actualmente vive en Carolina del Sur.

En su país ejercía la profesión como Fisioterapeuta, pero al llegar y decidir establecerse en este país debió trabajar en lo que primero saliera, entonces empezó limpiando casas. Su niña tenía dos años, debió buscar a alguien que la cuidara para poder apoyar a su esposo y reunir el dinero que necesitarían para alquilar un apartamento. No fue fácil adaptarse al sistema, pero todos los días fue aprendiendo algo que le permitiría avanzar.  

Para esta porteña que extraña a su mamá y las reuniones familiares, dar el paso para hacer los contactos y retomar lo que le apasiona no fue fácil, se llenó de coraje y se atrevió, resultó que vio a través de un aviso de prensa que estaban solicitando a masajista, entonces llamó le atendió una señora de habla hispana con la que pudo conversar y pautar una cita, luego ese día se entendió con la persona responsable quien puso la prueba de hacer un masaje y por allí comenzó todo para reincorporarse a lo que tanto le encanta .

Rosenyl es una mujer emprendedora y quiso ir más allá, le puso nombre a su marca “Rosse Body Help”, comenzó a darse a conocer a través de las redes sociales en Instagram @rossebodyhelp y en Facebook, su nombre aparecía entre las conversaciones de grupos por WhatsApp o Telegram, también en grupos de venezolanos en Charlotte y sus alrededores, cuando preguntan si conocen a alguien que haga masajes, terapia física y fisioterapia a el nombre de ella sale a relucir. Es así como paso a paso ha sumado a su lista más clientes que terminan satisfechos con el servicio que ofrece.

Este emprendimiento toma fuerza después de nacer su segunda hija, la pequeña de la casa . Rosenyl sigue estudiando para reforzar sus conocimientos y obtener una nueva licencia . “Me encanta lo que hago, poder ayudar a muchas personas con mi experiencia y marcar la diferencia en mi rama laboral”.

Recomendó a muchos migrantes que inviertan en sus estudios , y que no pierdan el foco hasta alcanzar lo que desean porque sí se puede.

Gracias Rosenyl, por abrirnos las puertas de tu casa para grabar el video, por permitirme compartir tu historia como migrante y demostrar que todo lo que te propones puedes lograrlo. Sigue adelante.

Hasta la próxima historia, se despide

Adriana Henríquez

@migrantesenvuelo