Resulta que es común entre muchos inmigrantes sentir culpa. La Psicoterapeuta asegura que todo va a depender de los principios inculcados en familia, ejemplo si tus padres te dijeron siempre que debías cuidar a tus hermanos porque eres el hermano mayor, entonces a la hora de emigrar y separarte de ellos vendrán los golpes de pecho, dijo Martínez que luego de estas situaciones, se van generando emociones que se traducen en la mayoría de los casos en sentirse mal, “comienzas a pensar tantas cosas luego de haberlos dejado que hasta dolor de cabeza te produce, la tristeza causa cortisol, se traduce en estrés y te puedes enfermar ”.
Ahora bien, ¿Qué hacer? Lo primero que debes hacer según la Psicoterapeuta es identificar la culpa, reconocer lo que estás sintiendo y la mejor terapia para eso es escribir, sí, porque te ayudaría a drenar todo lo que estas sintiendo. Pregúntate ¿por qué te sientes culpable ?, además aconseja recordar que, si dejaste a tus padres, es porque debes tener tu propia vida, necesitas crecer, vivir y dar los pasos que quizás ellos dieron en su momento.
Martínez quién también es Costeladora Familiar, manifestó que cuando escribas debes dirigir tus palabras a la culpa, es decir, comenzando diciendo: “La culpa me has acompañado hasta ahora, pero llegó la hora de separarnos, llegó la hora de crecer, de hacer mi vida , escribe todo lo que debas decir y si lo prefiere luego rompe o quema esa carta ”.
Recordó que todos los seres humanos necesitamos desprendernos y aunque se diga fácil y no lo sea debes hacerlo para poder avanzar y progresar. La culpa es una emoción que esta allí, no la eliminas, pero aprendes a vivir con ella.
Culpables por lo comida
Otro punto importante abordado durante un live en entrevista con Yorsa Martínez, fue la culpa que muchos migrantes sienten al comer o vivir con las comodidades que están experimentadas desde el país donde se encuentran. Se la pasan pensando que como sus familiares no están comiendo determinado plato de comida, tampoco ellos son merecedores de disfrutar de un suculento plato, gran error, porque lo que sea que estés comiendo desde tu nuevo nido es porque lo mereces, porque te lo ganaste , entonces pensar que los tuyos no lo pueden comer por la situación país e imaginarte cosas y cosas puede hacer que te caiga mal la comida.
Martínez insistió en que debemos tener cuidado con lo que decimos porque si te conectas con energías negativas, te estas haciendo un mal, tu cerebro lo capta. Entonces en vez de pensar tantas cosas agradece por tu plato de comida y por lo que puedan estar comiendo tus familiares.